Cuando estás embarazada comienzas a compartir todo con tu bebé. Esto significa que cuando te aplicas vacunas, no solo te estás protegiendo a ti, sino que también le estás dando a tu bebé algo de protección temprana.
Es importante que recibas las vacunas contra la tosferina, el tétanos y la influenza (gripe) en cada embarazo que tengas.
Aún antes de quedar embarazada, asegúrate de tener todas las vacunas al día. Esto te ayudará a protegerte y proteger a tu bebé contra enfermedades graves.