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Permanece activo pero con cuidado

Las personas que tienen hemofilia pueden ayudar a prevenir las hemorragias eligiendo ejercicios apropiados para mantener sus músculos y articulaciones en buen estado.

Es importante hacer estiramientos y un precalentamiento con algunos minutos de ejercicio suave ya que así se reducirán las probabilidades de distensiones o desgarros musculares y, por lo tanto, se reducirá la probabilidad de sangrado.

El ejercicio ayuda a mantener los músculos flexibles y fuertes y ayuda a controlar el peso, reduciendo así la probabilidad de una hemorragia

Los deportes y las actividades que se suelen recomendar para adultos y niños que tienen hemofilia incluyen:

  • Nadar
  • Caminar
  • Hacer yoga
  • Estiramientos

Los deportes que más implican un alto riesgo de sangrado incluyen:

  • Fútbol
  • Levantamiento de pesas
  • Correr

En caso de dolor:

El dolor es un problema común, y es necesario tratar de controlarlo cuidadosamente. Es posible que tengas dolor causado por el sangrado en los músculos y las articulaciones. Sigue las indicaciones de tu médico para tomar medicamentos no recetados para aliviar el dolor.  Los médicos suelen recomendar acetaminofén, o Dolex, para el alivio del dolor en personas que tienen hemofilia. Aunque el acetaminofén no reduce la hinchazón, es más seguro que otros medicamentos. 

Los medicamentos que las personas con hemofilia no deberían tomar incluyen los siguientes:

  • Aspirina
  • Ibuprofeno, como Advil o Motrin
  • Medicamentos que contienen salicilato. Este ingrediente está estrechamente relacionado con la aspirina. Alka-Seltzer, Pepto-Bismol y muchos medicamentos para la tos contienen salicilatos.
  • Otros medicamentos antiinflamatorios no esteroideos. Estos medicamentos están diseñados para reducir la hinchazón y el dolor.

Cómo prevenir lesiones y accidentes

Dado que una hemorragia suele comenzar con una lesión, es importante ayudar a prevenir las caídas en el hogar.

  • Elimina y repara cualquier peligro casero que pueda provocar caídas, incluyendo:
    • Pisos resbaladizos. Usa cera antideslizante para pisos y seca de inmediato cualquier derrame que se produzca
    • Poca iluminación
    • Zonas de paso desordenadas. Acomoda los muebles para que no estén en medio de las zonas de paso
    • Tapetes. Fija las alfombras al suelo con cinta adhesiva o tachuelas, y no utilices alfombras que se deslicen fácilmente
    • Umbrales elevados
    • Cables eléctricos. Reordena los cables para que no estén en medio de las zonas de paso
  • Mantén los muebles y otros objetos que tengan bordes filosos lejos de las zonas de paso que normalmente usas en el hogar
    • Elimina las mesitas de centro cuadradas o rectangulares
    • Acolcha cualquier borde filoso de un mueble
  • Toma precauciones cuando salgas al aire libre
    • En especial con escalones y aceras resbaladizas
  • Verifica el estado de tu calzado en forma regular
    • Revisa si están desgastados los tacones y las suelas de tus zapatos
    • Repara o reemplaza los tacones o las suelas desgastados
    • Usa calzado de tacón bajo que te quede bien y les dé buen apoyo a tus pies
    • Evita el calzado holgado, que puede hacer que pierdas el equilibrio y te caigas
    • Usa pantuflas o calzado con suelas antideslizantes